domingo, 26 de junio de 2016

Todo mal por la lluvia

Todo sea por el mal de la lluvia y por lo que decanta de lo que no se sabe aun.
Todo sea por la risa que decanta el saber a terrenos más áridos.
Todo sea por la bueno, todo sea por lo malo.
Todo sea por lo que no nos animamos a tener, y por lo que ya tenemos sin pensarlo.
Pensemos en lo poco que nos altera, y digamos no.
Pensemos con la lluvia en lo que queda tras haber hecho los deberes ciudadanos de no hacer nada.
La nada que pausa la lluvia acobijándonos tras mantos de sentires, sentires que lloran y que decaen en la pasión.

Alterados por lo infame de las dichas

Que ha pasado...
Que nos han dicho de más...
Todo sea por la muerte...
Qué dichoso.
Qué insustancial a la vez y que ganas de no hacer más que nada.
Qué potencialidad el rey con sus súbditos, que no ganan nada.
Que insustancial el vasallo.
Que muerto el príncipe.
Que leales las brujas, y los alterados por lo infame de las dichas.
Todo fue y será por las muertes de los sueños
Y de las cosas estancadas en estos pasaron buenos muchachos.
Y delirios.
Y marcaciones de textos.
Y menos iras para un futuro mejor, pero la desdicha de lo alterado por la nada,
y por los juegos de la vida nos desgotan, nos acogotan.
Nos impusilanimosian. Nos desabarrigan y nos empedocledían.
Todo por ser menos que todos y ganar más que la puta ballena que nos dice:
Seamos.
O no seamos.
Pero no querramos lo que no son los otros.

Heterosexualidades

Por más que la dicha cambie, por más que todo se quede en un cuarto, por más que leemos y leemos siempre lo mismo...
Hay alguien disculpándonos todo el tiempo que nos hace revivir la travesura de las dichas de la infamia.
Hay alguien que sucumbe perdido, perdiéndose, perdiéndonos, perforándonos el oído y el odio con travesuras de las dichas de la infamia.
No alteremos el alter-ego. No pensemos en lo pausado de antemano en la dicha de un truco. NO cambiemos lo que somos por un puto partido de futbol. No intentemos el amor en lo estancado.
No reservemos el pecado por la traición de no querernos más allá de lo que eramos en un final principiado.
No somos un patido infantil de futbol. Somos más que un Coca.
Somos más que la muerte que está en cada vaso austero por la hipocondría de querernos a salvo de los demás, haciendo que la nada se aparezca en los duelos in-fraganti, haciendo que muramos.
In-fraganti seré un peso pesado y volaré sin alas.
Heterosexualidades de la infamia.
Hetero-linfo-mentiras, hetero pesos de la gradación. NO alteremos el alter-cado. Que el alter-ego nos espera a la vuelta de cada esquina para darnos una trompeteada. El alter-ego, el que es Messe, el que es Ravirola. El que es el ser o no ser de Sartre, y CAMBIEMOS de canal. NO vale la pena el llanto. NO vale que amanezcamos con los ojos pegados de futbol. Heteroseanimosidades.
Todo sea ante la nada. La nada de un vaso de Fernet. De una calvicie estancada en el brillo del Technicolor. QUe sonríe a los televidentes posteriores, de la todo, de el nada.

martes, 8 de octubre de 2013

Culpa de un gran anhelo

Si tan sólo un ser
Soportara su ser
Que da miedo
De día
Y descansa
En la noche.
Si tan sólo
El sueño
Vencedor
De las puertas
Saciaría
El motivo
Que le dio
La vida.
Tú me haces
Enfrentarme
Con todo mi ser,
Que viene con toda
La carga
Culpa de un gran anhelo.
Tú me haces

Verme lejos
En el espejo
De tus ojos,
Que se hunden
En mi memoria,
Dejándome firme
Para ser fuerte.
Culpa de un gran anhelo
Viniste a aparecer,
Con tu rostro firme,
Con tu frente inmensa,
Con mejillas que contienen
La maravillosa luz
De tu mirada,
Y que me someten
A una lucha severa
Que va de la mano
De lo inmutable
De tu amor
En acto.
Yo vivo por ti,
Y cuando me ves
Siento todo por ti.
Siento el pecho
Inmenso
Como colgando
Del cielo
Y soñando
Estrellas,
Siento los brazos
gritando "¡Libertad!"
A la espera
Insobornable
De lágrimas
De felicidad.
Eres como
Una inmersión
Infinita
En un libro abierto,
Y tras una caricia
Tu suspiro
Es todo
Lo que importa.
Eres como el amor
Dándose la mano
Con los sueños.
Eres como una astucia
Que vuela alto
Despegando
De un pacto
Salvaje e indiscutible
Con uno mismo,
En el que
La tristeza
Y sus culpas
Se ahogaron
En las razones
De un corazón
Disparado
Al horizonte,
Al horizonte
De los dos.
Culpa de un gran anhelo
Caigo pero me levanto,
Culpa de un gran anhelo
Te conocí,
Y culpa de un gran anhelo
Vivo para contarlo.

miércoles, 17 de abril de 2013

Cuando menos lo esperes

Cuando menos lo esperes
Todo va a cambiar,
Cuando menos lo pienses.
En el momento en el cual
El bramido de la desesperación
Se eclipse con la rareza
Invisible, eterea.
En el momento en el cual
Sabrás pausar
La existencia.
Allí tu ser será
Tan inocente
Como el resurgir
De un momento
Furtivo.
En ese mismo instante
De amor
Inquebrantable
Como un sollozo.
Amor austero y libertado
De la reina de tu vida,
Que siempre renace
Estando a salvo
En una torre
Infranqueable,
Donde, en paz,
El fuego y los hielos
Dejando sus armas
Sobreviven
Hasta la idea
Del infinito
Con su tacto.

domingo, 6 de enero de 2013

Tus párpados semiabiertos

Madurez,
Fruto de tus
Párpados
Semiabiertos,
Fruto de
Mi angustia
Que oficia
De puente
Entre mis
Lágrimas
Y lo que
Contienen.
La dicha
Es para ti
Un triunfo
Que harás
Valer,
Como si
No alcanzara,
Con la lucha
De los días.
La desidia
Del resto
Cae aturdida
Como estas
Palabras
A esta hoja
Inexplicable,
Como este
Sueño
De no dormir
Que busca
Las pausas
De tu mirada
Para remontarse
Certero,
Como el
Canto de
Las aves,
Como tu  caricia
Experimentada
De cuando
Escuchas
Y envuelves,
De cuando
Ríes
Como si fuese
El premio
De quien
Un día
Decidió
Representar
La flor
De la vida.

martes, 20 de noviembre de 2012

Perdido en la brisa

Así es
como es uno
ábriéndose, jugándose, confiando
sin miedo
queriéndose, yendo
hacia fuera
creciendo firmemente
en la luz
y en la penumbra
volviendo
y viendo
siempre transitando
sin límites
al andar
buscándose ciegamente
y sin perderse
en el
sufrimiento
pero mostrándose
sufrido
fielmente
todo en pos
de avanzar
todo en pos
de la gloria
inevitable y porfiada